jueves, 2 de octubre de 2014

Y no aprendemos...


"Aprende como si fueras a vivir siempre", es la segunda mitad de una archiconocida frase de Gandhi. La segunda mitad, menos poética, menos alentadora incluso, y es que la mitad que la introduce la ensombrece, le resta aclamo fervoroso y optimismo. 
"Vive como si fueras a morir mañana...", la precede. 

Nadie vive así, pero a todos nos encanta la idea. Suena tan bien, tiene tanta fuerza... Quizá Gandhi la llevara a la práctica. Los mortales de a pie, desde luego, no. 

Pero es que de la segunda, mejor ni hablamos. Aprende. Ya el verbo no tiene la garra literaria y motivadora de "vive". Suena más flojo... No encierra la misma encrucijada meritoria, ni ese coraje decisivo. Definitivamente, suena "a menos". 

Una habla de siempre, la otra de mañana... Lingüísticamente hablando, "siempre" evoca demasiado tiempo, es un término muy lejano. "Mañana", en cambio, sí está ahí. Nuestro cerebro procesa esa palabra con más inmediatez, certeza y credibilidad. 

Una de las mitades nos advierte de la muerte, nos alerta. La otra, no da sustos. No apresura, ni apremia. 

Nadie vive como si fuera a morir mañana, sencillamente, porque es en ese mañana en lo que vivimos pensando. Pero de lo que estoy aún más segura, es de que nadie aprende como si fuera a no morir jamás. 

No aprendemos. Y punto. 

No somos capaces de reconocer errores, de rescatar moralejas y de enriquecernos con lo que vivimos. No es que no seamos capaces de quedarnos con el vaso "medio lleno" de las situaciones que pasamos, es simplemente que, muchas veces, no vemos el vaso... Imposible aprender de lo que no se ve. 

Académicamente hay personas que nunca dejan de aprender. Pero hay aprendizajes que no entran porque, sencillamente, son como la frase de Gandhi: ni son tan poéticos, ni tan inmediatos, certeros o creíbles, ni nos dan los sustos suficientes. 

Quizá deberíamos proponernos la frase mezclada: "aprende como si fueras a morir mañana". 
Intentar al menos que en ese mañana en el que vivimos pensando, y que sí nos suena certero y seguro, seamos capaces de recordar lo que aprendimos hoy. 
Hoy... porque vivamos como vivamos y aprendamos o no, no vamos a quedarnos para siempre. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario